A mis 22 años, no me crece la barba. Bueno, un poquillo, lo mínimo para parecer que me la dejo, pero con muchas zonas con densidad capilar escasa (llamadas clareras), como el bigote, la parte central del cuello, las mejillas, la parte baja de la mandíbula, etc. Dejarme barba era el sueño de mi vida y ahora sé que nunca se verá cumplido en su totalidad. Al menos me la dejo sin afeitar un mes y parece que es de una semana. A lo que iba, que dependiendo de la persona que me la vea (la barba), la ven de una forma diferente. He aquí las variantes más importantes. Las demás, o se corresponden con éstas o unas cosas intermedias.
Yo es que me veo guapísimo y mi madre también, así que con eso me basta. Sin embargo, como se puede observar, mi abuela me ve como una especie de sociólogo del siglo XIX, tenga la barba de larga o corta como la tenga. La mayoría me verá una mezcla de la primera y la segunda, aunque supongo que a todo el mundo le importa un rábano mi aspecto físico. Y luego está mi novia. Considera que las barbas afean y envejecen a sus portadores, además de pinchar cuales cactus, así que me tiene en una encrucijada mortal: si me la dejo, estoy feo y viejo; si no, tengo cara de niño adorable (cosa que me da muy mal rollo, por cierto). Así que tenemos un acuerdo: cortita y bien arreglada para tener un toque "desaliñado" que, por lo visto, está de moda y me queda bien. Pero vamos, que en cuanto pueda, la barba va puesta, aunque esté bajo amenaza continua.
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